Nacho Zubelzu
Nnace en 1966 en Reinosa (Cantabria).
La vida de Nacho Zubelzu está marcada por su pasión por el arte y la naturaleza que se desprende de la fascinación que le produce el entorno del Valle de Campoo en Cantabria, España. Se nutre de experiencias propias en las montañas campurrianas para interiorizar la belleza de los elementos naturales y plasmarlos de forma plástica en pinturas, fotografías, esculturas, instalaciones de gran formato, performance y pequeñas ilustraciones. El artista, que nunca ha trazado una línea divisoria entre pintura y escultura, más bien, son ámbitos que complementa, usa en sus obras la repetición y variación que generan secuencias en las que se aborda un análisis de las ideas, sensaciones y sentimientos.
En los últimos años sus viajes a países africanos (Kenia y Gambia) y asiáticos (China y Mongolia), o a parajes de naturaleza desbordante, como el desierto de Atacama en Chile, han inspirado su obra más reciente, en la que recoge el perfil y la huella, la esencia de la naturaleza y de los seres humanos. Traslada con su pintura, a cada personaje en un viaje nómada, hasta este otro mundo tan deseado. Y con sus “orogramas” cicatriza las fracturas de lo olvidado, de lo que el paso del tiempo ha deteriorado, devolviendo al objeto o entorno esa dignidad perdida. Otra fuente de inspiración es la trashumancia que realiza dos veces al año con pastores nómadas de Extremadura y Andalucía conduciendo ovejas y vacas por las cañadas españolas, en busca de las dos primaveras.